"La lectura puede ayudarme a pensar lo que aún no sé pensar, o lo que aún no puedo pensar, o lo que aún no quiero pensar, puede ayudarme a formar o a transformar mi propio pensamiento, a pensar por mí misma, en primera persona, con mis propias ideas. La lectura puede ayudarme a sentir lo que aún no sé sentir, o lo que aún no puedo sentir, o lo que aún no quiero sentir, puede ayudarme a formar o a transformar mi propia sensibilidad, a sentir por mí mismo, en primera persona, con mi propia sensibilidad, con mis propios sentimientos."
Me gusta leer libros, pero mi pasión es leer personas. Supongo que esta pasión la comparto con todos los profesionales de la educación, con los futuros Educadores Sociales. Leer personas no como quien lee el periódico, por encima, sin prestar atención. Sino leer personas como quien lee su libro favorito. Mirando a quien tengo enfrente como una persona única, con un valor incalculable, con una vida.
Leer personas me hace transformar mi pensamiento sobre ciertas realidades que quizás algún día juzgué. Leer personas me hace transformar mi propia sensibilidad, intentando ser empática con quien tengo delante y poder prestarle mi ayuda. Leer personas me hace sentir, me hace sentir que estoy viva, que estamos vivos. Que todavía las tecnologías no nos han aislado del resto. Leer personas me recuerda que somos seres sociales, que necesitamos unos de los otros. Me gusta leer personas que no hablen mi idioma, que no sean como yo. Leer personas transforma mi vida. Cada persona que leo, cada persona que conozco, marca un antes y un después en mi vida. Me gusta leer personas, me gusta conocer personas, me gusta vivir con personas, me gusta vivir para las personas. Me gustan las personas.
Lucía Herraiz
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