Rescatando reflexiones de Ezequiel Ander Egg.
En clases anteriores aprendimos mucho sobre un texto de Ander-Egg, en el cual nos planteaba varias cuestiones sobre las metodologías de la acción social, pudiéndolas sintetizar en las siguientes ideas:
No obstante...¿qué hay detrás de cualquier metodología?
"Detrás de cualqueir racionalidad científica hay marcos de referencia que condicionan como abordar el problema, proponer soluciones y aplicarlas" ( Ander-Egg). Nos referimos a los paradigmas, a las diferentes pautas que seguimos para conocer o actuar que sirven como marco de referencia u orientación, desde los que se mantienen determinados supuestos teóricos o metodológicos.
En las Ciencias Sociales podemos destacar tres de ellos fundamentales:
El Tecnológico o Positivista
El Interpretativo o Hermenéutico
El Dialéctico o Crítico
En el paragdigna Tecnólogico o la animación como Tecnología social, cabe señalar los siguientes aspectos:
- La ciencia y la realidad son objetivas. Se confía en que la ciencia puede explicar la realidad, conformándose una fe optimista en el poder del conocimiento positivo para resolver los grandes probleas prácticos y liberarlo de los dogmas de la teología.
- Los objetivos, los conceptos y los métodos de las ciencias naturales son aplicables a las ciencias sociales. Los problemas sociales tienen soluciones objetivas.
- El compromiso del animador es profesional, no ético o político
- El animador es un técnico que aplica aquello que han prescrito los teóricos. En la técnica no influyen los valores. Las técnicas se aplican en función de unos objetivos que sí tienen valores, para las técnicas son científicas y por tanto no están cargadas de valores.
En el paradigma interpretativo o la animación como interacción social, encontramos como claves las siguientes ideas:
- La realidad se crea y se mantiene a través de interacciones simbólicas y pautas de comportamiento que le confieren un sentido particular, al tiempo que cambiante.
- El conocimiento surge de la sensibilidad de cada actor social, surge a partir de sus propias vivencias, que orientan a actuar de un modo u otro.
- El animador, es un práctico, un mediador grupal que interpreta situaciones (teoriza) y favorece experiencias. Siendo el principal objetivo el desarrollo personal y colectivo.
Y Finalmente en el paradigma crítico o la animación como proceso político, hallamos las siguientes conclusiones:
- La realidad social se constituye en la historia y es fruto de las tensiones e intereses contrapuestos de las distintas clases sociales y grupos humanos. Se critica la creencia positiva y metodológica de las ciencias naturales y sociales (la ciencia misma no es neutral y responde a intereses).
- El animador es un actor social que desvela y recrea realidades y genera alternativas. Su objetivo es la emancipación de los individuos y las comunidades, la transformación social. Su tarea nunca es neutra, está comprometda política y socialmente.
Ante todos estos paradigmas, nos plantemamos qué paradigma podría ser el más adecuado para un educador social.
Definitivamente, podemos afirmar que el paradigma que más se asemeja a nuestra labor como educadores sociales es el paradigma interpretativo por un lado y el crítico por otro, dejando en un segundo lugar el paradigma tecnológico. El educador, no puede limitarse únicamente a aplicar una receta a un paciente, debe de ser crítico en su trabajo, conocer la realidad que le rodea y tener un pensamiento propio y transformador, que le permita actuar para cambiar y mejorar la realidad de aquellas personas que requieren su ayuda. Su acción será la consecuencia del conocimiento, no cabe duda, pero no se basa simplemente en dicho conocimiento "teórico", sino en aquel que se adquiere por la experiencia, con el contacto con otras personas, con la práctica y la interpretación de la realidad.
¿Y vosotros, qué paradigma pensáis que debe de tener un profesional de la Educación Social?
AIDA ALBALÁ CALLEJAS
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